En esa orilla extrema de su vida, Hollis tenía una única pena, y sólo por eso deseaba seguir viviendo. ¿Sentían lo mismo todos los agonizantes, como si no hubiesen vivido nunca? ¿Les parecía a todos la vida algo tan inverosímil y abrupto, o únicamente a él, aquí, en este momento, con sólo unas horas por delante para pensar y deliberar?
Importado de "Calidoscopio", en "El Hombre Ilustrado"
20120518
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