20110501

XXXIII

Una esperanza se hizo una casa y le puso una baldosa que decía: Bienvenidos los que llegan a este hogar.

Un fama se hizo una casa y no le puso mayormente baldosas.

Un cronopio se hizo una casa y siguiendo la costumbre puso en el porche diversas baldosas que compró o hizo fabricar. Las baldosas estaban colocadas de manera que se pudieran leer en orden. La primera decía: Bienvenidos los que llegan a este hogar. La segunda decía: La casa es chica, pero el corazón es grande. La tercera decía: La presencia del huésped es suave como el césped. La cuarta decía: Somos pobres de verdad, pero no de voluntad. La quinta decía: Este cartel anula todos los anteriores. Rajá, perro.

Extraído completamente de "Haga como si estuviera en su casa", del libro "Historias de Cronopios y Famas"

2 comentarios:

  1. buen libro, sin duda Cortázar nos desvela con su particular sentido del humor

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  2. jajaj como nos cagamos de risa leyendo esto xd

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