20120510

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  Nadie puede tener éxito sin suerte. Se puede tener el cerebro de Einstein, la sagacidad de un Barney Baruch y la sabiduría de un Thoreau, pero si la dama Fortuna no está de tu lado da lo mismo que te encierres en tu habitación y abras la espita del gas.
 No he hecho más que copiar esta última afirmación. Fue empleada por Schopenhauer un día que estaba cazando jabalíes en la Selva Negra. Hasta donde llegan mis conocimientos, no hay una palabra de verdad en la sentencia que acabo de enunciar (me refiero a lo de Schopenhauer), pero me siento mucho más seguro haciendo esta afirmación.

Importado de "Memorias de un amante sarnoso"

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